lunes, 29 de noviembre de 2010

Nieva


Ven. Aquí a mi lado.

Ya empezó a nevar.



Suena música, la dejé preparada aquella vez, por si ocurría.

Ya encendí la chimenea, y las velas y el incienso y las ganas. Ya encendí todas las ganas.

Las de buscarte, las de esperarte, las de mirarte, las de llegar a ti. Las ganas de caminarte lentamente, de engullirte, las ganas de envolverte con mis silencios, con mis gritos sordos, mis gemidos. Oigo el fuego, pero las ganas son de tus palabras. Encendí las ganas de perderme en el deseo, las ganas de olvidar que la vida es sólo un instante, un instante de vida y un instante de muerte. Ya encendí las ganas de manos, las ganas de dedos, de caricias, las ganas de brazos, de abrazos, las ganas de bocas, de besos, mis caderas te buscan y ya encendí todas mis ganas de sexo.

Encendí velas, una por cada una de mis ganas, velas para que la luz no ciegue la oscuridad en la que quiero estar, la oscuridad en la que me atrevo a enseñarte lo que soy y mis ganas.

Ahora no te vayas, que aún nieva.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Las ciudades invisibles

"El infierno de los vivos no es algo por venir: hay uno, el que ya existe aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos estando juntos.
Hay dos maneras de no sufrirlo.
La primera es fácil para muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de dejar de verlo.
La segunda es arriesgada y exige atención y aprendizaje continuos: buscar y saber quién
y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacer que dure, y dejarle espacio
".

En una semana se ha cruzado dos veces en mi camino. Sin duda prefiero seguir aprendiendo.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Entras o sales?



Estaba buscando una foto de una puerta, para algo que quería contar cuando me he encontrado con esta. Y aunque al principio he pensado que qué pintaba ahí ella, así, expuesta, … si yo lo que buscaba era una puerta de esas que no se sabe si están abriéndose o cerrándose, me he dado cuenta de que esta foto es la puerta a la vida.

Así estoy yo, en jornada de puertas abiertas. A la vida.

domingo, 31 de octubre de 2010

Tres




Rojo...rojo sangre...rojo vida...
Verde...verde quirófano...verde esperanza...
Blanco...blanco enfermera...blanco...quiero dejar mi mente en blanco...

Silencio a silencio han caído estos días, lentos, infinitos.

Hoy al llegar a casa, la vida se vuelve a llenar de colores.

sábado, 23 de octubre de 2010

Puedo


Ella cree que puede.
Y debe poder, hasta ahora lo ha hecho.

Pero de repente se derrama una gota...y entonces le parece un océano, y se le olvida que sabe nadar.

miércoles, 13 de octubre de 2010

viernes, 8 de octubre de 2010

Viernes

Me pregunto qué es lo que ven los demás de nosotros que nosotros no vemos.

Creo conocerme bien. Creo saber cuales son mis limitaciones, mis cualidades, que alguna hay, aunque ayer alguien me dijera: tú siempre tan modesta, mis defectos, mis posibilidades. Creo haber sentido, antes de que me dolieran, mis fracasos anunciados y haber anticipado alguno de mis éxitos.

Pero a pesar de llevar todos estos años conmigo misma, aceptándome, entendiéndome, justificándome, exponiéndome o protegiéndome, siempre hay cosas que sorprenden.

Es educado, dulce, guapo y parece mucho más joven de lo que en realidad es. Escribe canciones, dice que me sorprenderían sus letras.

Sin conocernos una tarde te pusiste al lado de mi mesa, y me lo contaste todo. Yo no pregunté, sólo te miraba y escuchaba. Dejé que te vaciaras. La otra tarde, ya sentado a mi lado, lo hiciste de nuevo. Debe escocerte mucho para que necesites volverlo a hacer. Y yo te volví a escuchar. A veces uno necesita contarlo muchas veces para que deje de doler, yo lo hice, ahora me doy cuenta de que quizá durante mucho tiempo, pero seguramente era el que necesitaba. Y él lo necesita ahora.

Esta mañana has llegado, yo ya estaba en mi mesa. Desde la puerta has ido dando los buenos días, has encendido el ordenador y te has sentado. De repente te he visto de nuevo a mi lado, te estabas agachando y me has dado dos besos. Nos han mirado todos.


¿Qué ha visto?

martes, 5 de octubre de 2010

Eran tan pequeños....me siento tan pequeña

Y espero, y espero que sea como antes, aunque sepa que ya nunca lo será.

No puedo dormir, me dice. No puedo. Y a mí encantaría acunarle, y llevarme su pena, llevármela donde no la pueda encontrar. Y devolverle la sonrisa a esos ojos azules que ahora están tristes. Y cantarle una nana, o contarle un cuento y llevarle al sueño. A un sueño feliz. A un sueño imposible.

Y con él también lo intento, intento llegar a él a través de mil recovecos, me acerco con cuidado, intentando no espantarle. Y le pregunto, sin preguntarle, y le cuento y le pido que me cuente. Y a veces se escapa, y otras lo consigo, consigo acercarme a él, y así intentar atrapar parte de su dolor y enseñarle que hay mil cosas que es capaz de hacer. Y hacerlas bien.

Y aunque ellos me dan sombra, soy yo la que quiero acogerlos en la mía.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

¿Dónde?

¿Dónde escondemos los deseos?. ¿Dónde los dejamos escapar?. ¿Dónde se van quedando amontonados?.

Quizá esperamos que alguien los encuentre y sepa qué hacer con ellos y nos los devuelva convertidos en realidad. Otros se quedarán en convertidos en sueños, en ese mundo del que quizá es mejor que no salgan, porque si lo hicieran perderían la magia que los creó.

Tengo deseos y sueños, pero sobre todo tengo realidades. Alguna vez, no muchas, quizá fue sólo una, se unieron, duró muy poco. Será por eso que me cuesta tanto inventar historias, porque no me las creo. Será por eso que disfruto tanto cuando otros las inventan y cierro los ojos y las veo, las veo bailar delante de mí. Será que debo perder el miedo, y dejar bailar las mías delante de los ojos de otros.

Tengo que intentarlo.

¿Más propósitos para el invierno?

domingo, 29 de agosto de 2010

Hoy, fue así

Igual lo puedo resumir. Si me lo propongo seguro. Pero ¿para qué?, si yo lo que quiero contar es que me han encantado las risas, todas y cada una de las que he vivido. Las lágrimas, todas y cada una de las que he derramado, se van llevando la sal, esa que hace que la herida aún escueza.

Calor, mucho calor, pero del humano también.

Distintas ciudades, distintas historias, el mismo fin.

Y después el mar.

Un alma de niño intentando entender un mundo de adultos. Ojos abiertos empapándose de vida, una vida que quiere entender pero que ahora también a él le sorprende. Preguntas sin filtros. Respuestas difíciles. Y su risa, su sonrisa siempre.


Y él, luchando por algo que por primera vez, en mucho tiempo, no puede comprar. Por llenarse los bolsillos de algo, da igual, de algo que no le haga sentir tan vacío. Comiéndose el mundo, pero vacío.

Y tú. Todo el mundo debería tener un amigo como tú a su lado. Una voz amable al otro lado del teléfono, una voz amable al otro lado de la hamaca, una voz amable al otro lado de la ola, una voz amable al final de la escalera, dame algo, lo que sea… y tú lo das. Ojos cansados, mirada alegre.

Sol, arena y agua. Olas, esta la salto, esta la engullo…..por esta me dejo llevar. Como los minutos, este le salto, este le engullo y por este me dejo llevar…


Y vosotros, si siempre vais conmigo, ¿por qué me faltáis?.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Agosto

Ojalá me sentara tan bien como a ti la melancolía. No soy capaz de vestirla como tú. Colocada en escenarios perfectos, se oye la música, incluso el silencio. La envuelves y hasta parece un regalo, uno hasta desearía sentirla, envolverse en ella y ofrecerse a ti. Todo son claroscuros, vives en ellos, les sonries.

La mía no, la mía se va quedando en escenarios que quisieron representar otras obras, en cruces de carreteras por las que he pasado mil veces, palabras que hablan de otros para no hablar de mí, mis recuerdos no bailan, huyen y yo no les persigo.

Miro al futuro, allí es donde quiero mirar. Mientras, este presente no está tan mal. Estáis todos.

jueves, 8 de julio de 2010

Tienes razón

Tienes razón, las experiencias las tengo, podría escribir sobre ellas. Además basta con colgar una foto y una frase, y esto se actualiza solo... Pero quizás la vida no es tan sencilla como eso, poner una foto y cuatro palabras con cierto orden. Quizá es que este año está siendo tan raro como este verano, en el que no para de llover...en el que los días a las tres de la tarde parecen noches...
Quizá cuando te llaman para ofrecerte un seguro "sólo para mujeres" las alarmas suenan en tu interior. La voz del chico prometía, he estado a punto de dejar que me lo explicara, sólo por escucharle, pero al final, he sido amable, no me gusta hacer perder el tiempo, y le he dicho: no gracias, no me interesa.

No gracias, no me interesa.

jueves, 20 de mayo de 2010

No es tan difícil

En ocasiones mi vida pareció una habitación desordenada. Entras y no sabes por dónde empezar. Se van dejando cosas, unas encima de otras, pasado y presente, no sabes qué vale y qué no, no sabes qué está limpio y qué está sucio, no sabes quién lo dejó allí ni por qué, y lo que da es una pereza tremenda empezar. Pero sí sabes qué lugar ocupa todo, no es tan difícil. Parece que en mi vida se van colocando muchas cosas.

viernes, 16 de abril de 2010

Lo que importa

Es viernes, fin de semana por delante. Un montón de horas en la línea de salida. Dos llamadas de teléfono. Una para confirmarme que la vida, de momento, facilidades lo que son facilidades no está dispuesta a darme. No importa. En la otra llamada, me doy cuenta de que no es para tanto. Y eso, sí importa.
Y entonces sé que yo no estoy dispuesta a olvidarme de las cosas que realmente son importantes.

miércoles, 7 de abril de 2010

Mala memoria

Esta tarde me he dado cuenta de que hay muchas cosas que se necesitan para ser feliz, bueno, o al menos acercarte. Una de ellas es tener mala memoria, eso te permite no saber lo que es el rencor.

martes, 30 de marzo de 2010

Voy

Desde esta mesa, donde estoy, no llego a ver el mar. Casi tan lejos como mis deseos. Pero quizá, igual que para alcanzar el mar, lo único que necesito es ponerme en camino. Y eso voy a hacer.

lunes, 22 de marzo de 2010

Soñar

A veces me gustaría poder tener los ojos muy abiertos. Y volver a soñar despierta.

domingo, 21 de marzo de 2010

Cosas que suenan a triste

Siempre pensé que los padres éramos quienes teníamos la obligación de enseñar a vivir a los hijos, pero ellos día a día nos devuelven más de lo que nosotros les podemos ofrecer. Mi hijo, sin querer, me ha enseñado esta canción, entre muchas otras cosas, y este va a ser el comienzo de mi blog.

Espero que no todo lo que escriba aquí sean "Cosas que suenan a triste...cosas que suenan a olvidar".